jueves, 2 de junio de 2016



¿Dónde tú? ¿Dónde yo?
Transcurriendo amalgamados
la fugaz travesura del beso.
Descolgándonos yuxtapuestos
en la caricia de la aguada tinta
de un verso irremediado.
¿Dónde tú? ¿Dónde yo?
Amándonos sin ningún sentido hasta el reproche.
Aturdidos, después, en la estridencia del silencio.
Aventurados al exceso de mirarnos.
Tu piel fría calentándose en mis manos
que a su vez se entibian en tus muslos.
El espasmo contenido en tu teoría del amor tántrico
y ese placer de que te acurruques en mi pecho
del cual no quiero privarme.
¿Dónde tú? ¿Dónde yo?
En la poesía inmensa de la tarde,
que cae como caen los versos endecasílabos de tu soneto.
Hay un color, un aroma o una mirada
que me provoca escribirte lo indecible en un poema.
Algo, para mí desconocido, me arrebata a tu costado
y transito el frágil instante de tu nombre
descubriendo constelaciones
que dibujo uniendo los lunares de tu espalda.
Tu cuerpo huele al jazminero de mi patio
y tu boca me sabe a un añejo bonarda.
Creo que nos estamos volviendo permanentes,
y así, casi sin decirnos nada.
¿Dónde tú? ¿Dónde yo?
¿Dónde nosotros?
Elije un libro que te guste y tráelo a la cama
que lo vamos a leer en un abrazo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario